1. El
arbolito
Para los venezolanos el arbolito simboliza la llegada de la
Navidad a nuestro hogar. Sea grande o pequeño cada familia se preocupa por
adornar el arbolito y exhibirlo con orgullo.
Tanto así, que en algunas casas
se coloca el arbolito en el porche, para que todos los vecinos sean
testigos de la llegada de la Navidad.
Además, en Venezuela podemos encontrar desde arbolitos
tradicionales, con luces y adornos de colores navideños, hasta los más
coloridos con adornos fucsias, turquesas, verde manzana e incluso azul milenio.
¿Se acuerdan de los arbolitos del nuevo milenio en el año 2000? ¡Cómo
olvidarlos!
2. El
pesebre
En una casa venezolana no puede
faltar el pesebre. Esto no es algo que inventamos nosotros, de hecho, es una
tradición que tiene su origen en Italia pero fue heredada de los españoles.
En España al pesebre le llaman Belén. Pero indistintamente del nombre, el
objetivo es el mismo: representar el nacimiento del Niño Dios a través de
figuras grandes o pequeñas.
Algunas familias arman pesebres muy grandes, que ocupan todo un
jardín; mientras que otras colocan uno pequeño en un lugar importante de la
casa. Hay incluso personas que coleccionan pesebres, de cualquier tamaño, color
u origen. En definitiva, esta es una de las costumbres navideñas de Venezuela
que no debemos perder nunca porque nos recuerda la importancia de la familia y
nos brinda un motivo más para celebrar.
3. El
Intercambio
No importa si es un intercambio
de regalos, de chucherías o
hasta de cartas y dibujos. Un intercambio es una dinámica divertida que en
Venezuela se realiza en la mayoría de las familias y también en los grupos de
amigos y trabajo.
El intercambio es compartir sin importar la persona que te ha
tocado y también es una ocasión ideal para agradecer por tener la oportunidad
de celebrar un año más juntos.
4. Las
hallacas
Preparar las hallacas en familias es un privilegio que no todas
las familias en la actualidad pueden permitirse, pero aun así todas hacen un
gran esfuerzo por comprar los ingredientes y reunirse para hacerlas en familia.
En muchas familias se dividen los ingredientes y así el gasto es
compartido: unos traen las hojas de plátanos, otros las aceitunas, otros el
aceite, otros la carne para el guiso y así sucesivamente.
Al final, con refrescos, gaitas y las ocurrencias de todos los
miembros de la familia, las hallacas quedan más sabrosas de lo normal. ¡Es ese
toque de cariño!
5. Las
pintas
Para los venezolanos celebrar la Navidad y el Año Nuevo es algo
muy importante. Tanto, que para nosotros es indispensable lucir bien arreglados
y perfumados.
Para la mayoría de las familias, las costumbres navideñas dictan
que se debe vestir con ropa nueva los días más importantes del mes: 24 de
diciembre y 31 de diciembre. Hay quienes incluso estrenan sus “pintas” el 25 de
diciembre, 1 de enero y pare de contar.
6. Las
misas de aguinaldo
Venezuela es el único país del mundo que cuenta con la
autorización del Vaticano para cantar aguinaldos en las celebraciones
litúrgicas. Sin embargo, estos cánticos solo pueden hacerse en unas misas
especiales celebradas a primera hora de la mañana.
Estos actos se denominan Misas de aguinaldo o Misas de gallo. A
pesar de la hora, a estas misas acuden muchas familias para encontrarse con sus
amigos, vecinos y seres queridos, cantar aguinaldos y compartir.
7. Cenas
navideñas
Al igual que los intercambios de regalos, en los grupos de
amigos o en las empresas no pueden faltar las cenas navideñas. Se trata de una
reunión fuera del horario laboral organizada para que todos los trabajadores
compartan.
En las cenas navideñas no puede faltar el plato típico
venezolano para las fiestas decembrinas y tomar ponche crema.
Algunas empresas deciden hacer almuerzos navideños en vez de
cenas, una alternativa que igual se agradece.
8. La
llegada del Niño Jesús
La noche del 24 de diciembre todas las familias venezolanas se
reúnen para celebrar por adelantado el nacimiento del Niño Jesús. La tradición
consiste en cenar en familia el plato típico navideño y a las 12 de la
medianoche colocar los regalos para los niños en el arbolito.
A diferencia de muchos países del
mundo, en Venezuela los niños esperan despiertos el nacimiento del Niño Jesús o
la llegada de San Nicolás para abrir sus regalos y disfrutar de los juguetes.
El
sancocho del 25 de diciembre
Después de una noche de música, baile, cuentos y tragos los
venezolanos acostumbran a preparar un sancocho. La reunión es perfecta para que
los niños disfruten de los juguetes que les ha traído el Niño Jesús o San
Nicolás y para seguir celebrando la mejor época del año.
Para
quienes no saben lo que es un sancocho, es una sopa o hervido con carne y
verduras que, por lo general, se realiza al carbón o a la leña
10. Las
maletas y otros rituales de año nuevo
Al igual que el 24 de diciembre,
para el 31 los venezolanos también se reúnen en familia, cenan el plato típico
y celebran la llegada de un nuevo año. Por lo general, las reuniones se
realizan en casa de la abuela y las mujeres pasan esta fiesta en compañía de
sus madres e hijos.
Después del cañonazo no puede faltar la tradición de salir a la
calle y recorrerla de esquina a esquina con una maleta. Cuando una persona
realiza esta especie de ritual, significa que espera viajar mucho el año
entrante.
Otros rituales de año nuevo incluyen utilizar una prenda íntima
de color amarillo para la suerte, comerse 12 uvas al ritmo de las 12
campanadas, celebrar el año nuevo con un cotillón o guardarse un billete entre
la ropa.
Sin duda la Navidad en Venezuela es la mejor época del año y
para muchos es el único momento en el que toda la familia puede compartir, por
eso debemos luchar para mantener las costumbres navideñas y la unión con
nuestros seres queridos.
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